

El rover Perseverance de la NASA, que desde 2021 explora el cráter Jezero en Marte, recolectó una muestra denominada “Cañón Zafiro” que podría ser la evidencia más sólida hasta ahora de vida pasada en otro planeta. La roca contiene fosfato y sulfuro de hierro, minerales como vivianita y greigita, que en la Tierra suelen formarse como subproductos del metabolismo microbiano.
Los científicos señalan que se trata de una posible biofirma, ya que los mismos procesos podrían explicarse por reacciones químicas no biológicas. Sin embargo, la coincidencia de estos minerales con compuestos orgánicos fortalece la hipótesis de que Marte albergó microorganismos hace miles de millones de años.
Además de esta muestra, Perseverance detectó otras formaciones intrigantes como las rocas Cheyava Falls y Masonic Temple, con estructuras conocidas como “manchas de leopardo” y “semillas de amapola”, vinculadas en la Tierra a actividad microbiana.
En total, el rover ya almacenó 30 tubos de muestras, que representan un catálogo invaluable del pasado marciano. La NASA trabaja en la Mars Sample Return Mission, en cooperación con la Agencia Espacial Europea, para traerlas a la Tierra y analizarlas con instrumentos avanzados. Sin embargo, los costos y los retrasos ponen en riesgo el cronograma, mientras China avanza con su propio plan de retorno entre 2028 y 2030.
El hallazgo abre un nuevo capítulo en la búsqueda de vida fuera de la Tierra. Cada muestra recolectada ofrece claves sobre cómo surgió la vida en el cosmos y acerca a la humanidad a responder una de sus preguntas más profundas: ¿estamos solos en el universo?
Fuente: Infobae